viernes, 23 de marzo de 2018

Antología CBE: Conversación íntima









Por mucho tiempo fue el espíritu el regente de toda palabra y el depositario del saber. Pero con el paso del tiempo hemos logrado entender que las manos hablan, los pies gritan, el torso canta y el corazón esconde secretos en los silencios entre cada latido. Karla nos prohibe olvidar que son los órganos los que nos otorgan vida.
-a.e
____________

He decidido hablar contigo nuevamente Corazón.

Quiero mirarte a los ojos mientras contestas mis preguntas, deseo que digas toda la verdad, que me hagas tu confidente como tú lo has sido para mí.

Dime porqué callas, porqué ya no siento tu cadencia guiando mis dedos al escribir. Quiero saber lo que ha callado tu canción, esa que me dejabas escuchar para arrullarme, para hacerme estremecer de amor o para dejar que las lágrimas liberadoras surcaran mis mejillas...

¿Qué ha sucedido con tu voz? ¿por qué ya no logro escucharla? ¿acaso he perdido ese lazo contigo? ¿será que te he traicionado?

No comprendo tu silencio, no logro descifrarlo, no veo la razón subyacente, se me esconde, se me pierde en la neblina de la soledad.

Y ante este cuestionamiento no me dejas ver tu rostro, miras hacia otra parte mientras tus labios permanecen sellados y no pronuncian palabra alguna, me dejas en este silencio que me envuelve, que me abraza, que me traspasa y que me hiere.


¡Corazón, por favor, vuélveme a hablar, vuélveme a cantar, vuelve a hacerme soñar! ¡no me dejes sin tu voz, sin tu compañía, sin tu guía y tu sabiduría!



Karla

Rodríguez 

viernes, 16 de marzo de 2018

Antología CBE: Los pinceles yacen olvidados…






No solo es que Loida dejó al descubierto que encima de una mirada se posa otra en el momento que la primera queda al descubierto: "Ver, ser visto y dejarse ver". Los aforismos del deseo. En 'Los pinceles' no solo hay deseo, no solo se figuran siluetas sobre espacios vacíos, sino que hacen de la silueta una matriz de cuerpos y vida. 
-a.e
_________


Los pinceles yacen olvidados
La tela está en blanco
La paleta llenita de colores
Una ventana deja entrar luz, agua y viento.

Poso desnuda y espero a que mengüe tu paso
No dejas de dar vueltas y yo arreglo mi cabello una vez más…
Sonrío
Y observo en silencio tus miradas furtivas que van
De la ventana a mi
De mi a la tela
De la tela a no se que lugar distante en tu mirada

Crees que ya no quiero posar pero me divierto
Caminas de extremo a extremo en la habitación
Callas

Por fin coges un pincel
Y en vez de tocar la pintura
Dibujas desde lejos mi silueta que ya no está tensa
Sino expectante

Me río de nuevo
y me haces un gesto para que calle y no me mueva
Te vuelves
Después de un rato coges otro pincel
Yo vuelvo a arreglar mi cabello
Y hablas por fin
Me pides que vuelva mañana.


 Loida 

 Pineda



viernes, 9 de marzo de 2018

Antología CBE: Rosas amarillas







La violencia no es un campo restringido para la agresión, no es exclusiva del tosco gesto de un puño cerrado. La violencia es irrumpir el orden de las cosas. Es cuestionar el lugar de la estabilidad y atentar contra el sosiego. El amor es violencia. Con Katya, hasta los pétalos de rosas pueden herir.
a.e-
___________ 
Decían que era muy exigente. ¿Yo exigente? si lo único que pedía era que el tipo no me invitara a tomar cerveza, mis cervezas me las podía pagar yo cuando estaba con mis amigas. Lo que quería era que me invitara a cenar solos, sin tanta gente a nuestro alrededor, sin tanto ruido, para que nos viéramos de verdad y nos escucháramos, que abriera mi silla y mi puerta y, de paso, si podía, abrir mi corazón. Que entendiera mi pasión por la lectura, aunque no la compartiera, que entendiera esa parte de mí que cuando íbamos en su carro y decía que me gustaba una canción y le subía volumen era porque necesitaba oír la canción sin que me interrumpieran, no porque no me interesara lo que me decía, sino porque estaba apreciando el arte de alguien más, que era mi versión de él viendo su fútbol, que entendiera que a veces (no siempre) iba a despertarlo por las noches porque necesitaba compartir algún pensamiento. Y no es que no me gustaran los zapatos caros que me había regalado, porque eran lindos, de verdad que lo eran, solo que no eran quien yo era, yo era feliz con tan poco. ¡Cuántas veces dio mil vueltas averiguando qué regalarme, cuando cada vez que pasábamos por una librería yo repetía cuánto necesitaba tener este o aquel libro! ¡ni qué hablar de las flores que me traía! ¡eran preciosas! pero ¿alguna vez supo siquiera cuáles eran mis flores favoritas? no eran las más caras, las rosas amarillas, ni las más hermosas, pero lo eran para mí, porque eran sencillas, delicadas y alegres. ¿Alguna vez quiso leer algo que yo escribí? ¿supo siquiera que era ahí donde yo verdaderamente estaba, no en mi pelo que tanto le gustaba, ni en mi cuerpo, ni en todas esas pláticas falsas que alguna vez sostuvimos? ¿supo alguna vez que tan solo tenía que leer lo que yo escribía para conocerme? ¿supo alguna vez que no tenía que decirme gran cosa, a lo mucho regalarme un libro de poemas de Benedetti y subrayar algún verso y que entonces hubiera tenido mi corazón por siempre?


                                                                                                                                      Katya 
                                                                    Álvarez

jueves, 8 de marzo de 2018

Exp(l)i(c)ación: Una entrevista a Briony Tallis / Segunda Parte

A manera de continuación 
(...)


A: ¿Estabas enamorada de Robbie?

B: ¡Por todos los cielos! ¡Sí! Pero antes de que mantengas esa sonrisa de chimpancé necesito que entiendas en qué sentido es que estoy confesando que estaba enamorada de él. En Robbie había algo que había transgredido el orden de lo familiar. ¿No has notado la ausencia de hombres dentro de la historia, y de aparecer presencia es desestabilizadora? Mi padre era un espectro, León un recuerdo. Robbie al ser el predilecto de mi padre, el amigo de León, usurpó sus espacios, pobló sus ausencias. A la larga, el calor familiar fue lo que hizo de él un objeto de deseo y amor. Espero que el uso de la palabra ‘objeto’ no te genere complicaciones. Soy inglesa, pero no puedo evitar la impertinencia del francés. Como decía, Robbie no es cualquier hombre. Al ser incluido dentro de la dinámica familiar, esta aportó lo suficiente para hacerlo pasar como uno de los nuestros. Pero a pesar de eso, de la cotidianidad y de su participación en la lógica familiar él nunca dejó de ser un extraño; y precisamente eso es lo que le constituye ese algo que invitaba al acto incestuoso. Cee tardó mucho tiempo para llegar a esa conclusión, yo lo supe antes. Cuando le dije a Robbie que le quería, deje al descubierto ese apetito incestuoso. Era una niña, y aunque no era mi intención un acto de sexos, si quería que él me consumiera; quería que en ese agujero negro que irrumpía el centro de su ojo fuera llenado con mi rostro, quería quedar capturada en él. Tu sabes de lo que te estoy hablando. Tu sabes que se siente encontrar tu imagen reflejada en la niña de los ojos de otra persona, que en aquel vacío no hay más espacio que para uno y nada más. No me mires así, no deseo fastidiarte con esto. Solo lo mencionó porque se te nota en la... 

A: Podríamos continuar, por favor. 



B: Robbie era demasiado gentil, incluso me veo obligada a señalar en él una fiera condición de noble espiritual, un Caballero cristiano. En esa memoria donde simule mi perdida y rescate, se estableció nuestra posición del uno para el otro. Una medida de perfecta de distancia y cercanía. Robbie cercó con prudencia, obligación familiar y social los límites de mi deseo; algo que Paul no pudo hacer. En el caso de mi hermana, las cosas fueron muy distintas. El accidente con el jarrón fue su propio Edén, la ‘caída’. Ambos estaban sumergidos en la ignorancia incomoda que provocaba su interacción, sabían que había un algo que excedía la condición familiar, pero no podían alcanzarlo o entenderlo, no había forma de que ese exceso tuviera una relación con el deseo hasta el momento en que el jarrón se rompió. Después de eso jamás podrían volver al estado original de inocencia. En la fuente comieron de la manzana, y con su ingesta el objeto oscuro que era Robbie para Cee, eso que que era él y más que él mismo, emergió en forma de deseo. La posición de sangre que Robbie había asumido al cubrir los huecos dejados por mi padre y mi hermano, había sido rota cuando su hermana, mi hermana, nuestra hermana, expuso el misterio de su cuerpo. Lo que antes era sin razón, locura en Cecilia, se convirtió en la cosa más razonable, evidente e inevitable. 

A: A eso es lo que te referías anteriormente... con lo que provoca la cercanía con los otros... Robbie quería apoderarse de ella... su total inutilidad venía de que el rol como familiar que se le había asignado a Robbie era incapaz de domesticar la monstruosidad que provocó la desnudez de Cecilia... así fue como el deseo se convirtió en el camino más coherente para responder a esa intensidad... y es ahí donde interviene la…

B: …Carta.  A: La carta. ¿Porqué la leíste, Briony?

B: ¿Estás seguro que deseas abordar este tema habiendo otras cosas que discutir?

A: ¿Porqué Adán no pudo decirle que no a Eva? No bromeo. Quiero saberlo. ¿Porqué leíste la carta?  

B: Esta bien. Procurare ser lo más clara. Hay dificultades en el hecho de generar juicios fuera del tiempo, ¿Cómo enjuiciar al pasado por el pasado mismo? No considero nada provechoso querer explicar lo que sucedió en un tiempo que ahora es confuso, tiempo que visto desde ahora parece haber corrido sus lineas y contornos. Lo que un día fue una roca, ahora es una gota de lluvia que se pierde sobre el océano. No puedo decirte nada de ese tiempo que sea real, solo puedo decirte lo que ese tiempo es ahora para este tiempo. Todo lo que sucedió ese día solo tiene sentido ahora después de años. Es desde aquí, lugar donde al lanzar las palabras adecuadas, hacemos de la ensoñación un hecho. Dios es un escritor. Alquimista de símbolos y herrero de lenguajes. No es que con 'Expiación' he logrado hacer que mis impertinencias, caprichos y descuidos posean sentido, es que esas impertinencias, caprichos y descuidos fueron desde siempre el sentido del libro que estaba ya oculto en el tiempo que solo el tiempo podía desenvolver. Y a su vez, en este futuro, encontramos la única manera de justificarlo al fabricar su propio pasado, todo con la intervención del arte en el enigma real de las cosas. Como Dios, hice que la representación sea más real que lo real."Y el verbo, se hizo carne" dice el arcano.

A: No me veas con esa cara, te entendí. Continua.

B: Con el libro he creado un mundo, y si en dicho mundo hay salvación y prevalece la esperanza, es por consecuencia de que la redención introdujo el pecado que ella misma tenía que expiar. No hay linealidad en esto, es un circulo perfecto, un Sol que alumbra sobre justos y pecadores. Es el rostro de Dios que nos sonríe al hacernos ver que el infinito es la trampa de una eternidad escondida detrás de un beso, en la espera o en la mirada. La eternidad es la tonta mueca que nos provoca el sonido de la voz del amado que escuchamos en nuestros más profundos silencios. Son esos instantes de tiempo, los frutos que añora la eternidad. Mis pecados fueron expiados con el libro, porque el libro era mi pecado. Todo esto mi querido muchacho, tu, yo, Robbie, Cecilia, y el que esta leyendo esto: es el eterno retorno de lo siempre distinto. ¿Sientes la vibración que se apodera de tu habitación, y ves como la luz incandescente va llenando la habitación?¿Ya notaste el sudor que corre por tu mejilla? Es el fuego del juicio final. Es la lava del volcán. Ese eres tu Alex que acaba de apretar otra vez el botón. Si ahora destruyes lo que has creado no es porque hayas comprendido la mística de la destrucción en el volcán de juguete, es porque en el volcán esta anudado el misterio de que para crear siempre tienes que destruir. Los ciclos entre un mundo que viene y uno que va, es tu expiación.

A: Briony...

B: ¡Abrázame, que el fin nos ha venido!


A manera de Drama

Si quitó los anteojos, creyendo que con aquel movimiento las cosas podrían tornarse distintas. Alex no encontraba la manera de convencerse de que Exp(l)i(c)ación: Una entrevista a Briony Tallis / Segunda Parte fuese lo suficientemente equilibrada en lo que respectaba a filosofía y literatura, y se lamentaba, con un insistente mordisqueo en el labio superior, de su futilidad para superar las mismas obsesiones teóricas que lo acongojaban y lo mantenían en el mismo letargo de melancolías de un artista fracasado. Sabía que le quedaba poco tiempo para publicar el adefesio que en algún momento llegó imaginar que era texto digno de simpatía y alegría, pero al plantearse la tarea de visualizar sus letras en la carne de una fantasía, le resultó patético verse a el mismo sentado sobre su cama hablando con la espectralidad de un espectro; y se cuestionaba, justo cuando regresaba a la manías de infancia, las mismas que le dejaban pequeños cabellos en la mano, sobre el nivel de locura y desajuste que puede haber en la cabeza de alguien que se da a la tarea de imaginar las imaginaciones de una imaginación. 

La puerta del cubículo que alguna vez Alex llamó oficina sonó de forma estridente. Del umbral emergió una silueta. Una sonrisa cándida, dos ojos inquietos y suspicaces se posaron sobre él. Alex devolvió un triste movimiento de cabeza hacía Manuel; el mismo al que muchos llamaban Doctor o Doctor Valencia. 

- ¿Vas a ir ahora? - dijo Manuel con curiosidad infantil, mientras le extendía el brazo mostrando su puño cerrado con el índice y el meñique extendidos. 

- No creo. Tengo algo que hacer - dijo Alex devolviendo el mismo gesto en el contacto con el puño del Doctor.

- Te he llevado al Club para que fueras responsable. Me estas haciendo quedar mal. Ya no se puede confiar en la gente - dijo Manuel alzando la voz - Se han perdido los valores - musitó junto otras palabras que a penas se pudieron distinguir. 

Alex solo sonrió al ver como la blancura de la gabacha se perdía en la oscuridad del pasillo, y después de que desaparecieron las barrocas risas del Doctor, encontró el valor que necesitaba para apretar el botón del computador.

Tenía que destruir aquello para empezar de nuevo; como si fuese una resurrección, como el Cristiano que era pero que negaba ser. 



San Salvador, 2018.


A manera de Final

Botón [Supr]
        *
"¿Está seguro que desea mover este archivo a la Papelera de reciclaje?" 
        *
Si [Botón Enter]
        *
[Clic derecho sobre el Icono de Papelera]
Ver: Vaciar la papelera de Reciclaje
[Clic Izquierdo en Escritorio]
        *
Word/Archivo/Nuevo [Botón Clic Izquierdo]

(...Exp(l)i(c)ación: Una entrevista a Briony Tallis 


...)












lunes, 5 de marzo de 2018

Antología CBE

Imagen relacionada



Aunque el proyecto estuvo cerca de pasar al cajón de las intenciones y estuvimos a punto de 'engendrar peste*,' queremos dar a conocer a todos que: la posibilidad de ver publicado un libro escrito por miembros del club ha logrado alcanzar una mayor consistencia; hicimos que el deseo llegara a un estado 'homuncular'. 

Por el momento se cuenta con la participación de siete miembros de nuestro club, número que sigue abierto para aquel que se quiera incorporar. Este post, en el cual he intentado que prevalezca la mesura de todo tipo, es para anunciar un adelanto de algunos escritos que serán incorporados dentro de la Antología. En las próximas semanas (si la voluntad de Saturno así lo permite), se publicará a través del blog un escrito de cada uno de los miembros del club que participan de este proyecto. 

Con estas publicaciones esperamos que se pueda motivar y terminar de convencer a aquellos miembros que por efecto de la imperante naturaleza de la lectura y la predominancia de la letra, en su exceso que es evidencia de su causa y carencia (y así de rápido se traiciona a la mesura que es hija de la vieja y solterona Prudencia**): escriben

¡Espero que los disfruten tanto como Yo y Mi lo hemos hecho! 



Tralalín, Tralalán, 
Aserrín, Alacrán,
¡El secreto es que Pizarrín es un Shamán!

Dulces sueños...


Posdata que debería de ser encabezado: Actualmente, el proyecto tiene un acuerdo previo para ser publicado por la Editorial de la Universidad Evangélica de El Salvador, quienes incurrirían en los gastos que implica la publicación de un texto. Por eso creemos necesario aprovechar esta oportunidad y no dejamos de insistir en que participen aquellos que tengan escritos (poesía, ensayo, cuentos, ¡hasta las cartas de Bachillerato!).

Para más información pueden escribirme al correo escobarblancoalex@gmail.com o a escobarblancoalex89@gmail.com, o bien a través de Loida Pineda loidapineda@gmail.com.

Un saludo a todos.


*"Aquel que desea pero no obra, engendra peste" de William Blake, Los Proverbios del Infierno (1790-1793).
** "La Prudencia es una vieja solterona rica y fea cortejada por la Incapacidad" Ídem.

jueves, 1 de marzo de 2018

Matar a un Ruiseñor | Harper Lee


MATAR A UN RUISEÑOR - HARPER LEE


“Pienso que hay una sola clase de gente. Gente” Harper Lee.

Saludos a todos, amigos del Club de la Buena Estrella, en este inicio del tercer mes del 2018 en el cual también abordaremos el tercer libro de nuestro calendario para el año. El mes de marzo corresponde a la viñeta “Clásico”, viñeta dedicada a todos aquellos libros esenciales en el currículo de cada lector individual; “los clásicos son libros que cuanto más cree uno conocerlos de oídas, tanto más nuevos, inesperados, inéditos resultan al leerlos de verdad” los describe Ítalo Calvino.

El clásico elegido para este año es Matar a un Ruiseñor de la autora estadounidense Harper Lee, publicado en 1960 y de éxito instantáneo, ganando en 1961 el premio Pulitzer de ficción, y rápidamente convirtiéndose en un amado clásico entre el público estadounidense e infaltable lectura en las escuelas de ese país.

Encontraremos acá entrañables y memorables personajes protagonistas, de la interrumpida inocencia de los pequeños Jean Louise y Jem, a través de quienes conoceremos la historia, a la estoica y valiente posición de Atticus Finch, considerado uno de los personajes ficticios más amados y un modelo para la práctica de la profesión legal.

En 1999 una encuesta de bibliotecarios a nivel nacional (EE. UU.) nombró a Matar a Un Ruiseñor como el primero en la lista de libros que un adulto debe leer antes de morir.

Muy poco después de su publicación, en 1962, fue llevada a la gran pantalla en una también exitosa producción ganadora de tres premios de la Academia.

Con estos antecedentes, y muchos más que se quedan en el tintero para no alargar la introducción, espero que sea un libro que todos disfrutemos y haga honor a su viñeta.


SINOPSIS

Scout Finch es una niña de seis años, huérfana de madre, que vive con su hermano, Jem, y su padre, Atticus -un respetable abogado- en el imaginario pueblo sureño de Maycomb. Los niños tienen además un amigo, llamado Dill.

La narración -hecha por Scout- tiene lugar durante un verano en plena época de la Gran Depresión y gira alrededor de dos episodios: por un lado, a la fascinación y terror que los chicos sienten por la figura de Boo Radley, un misterioso y huraño vecino; y, por otro, el juicio en el que Atticus decide actuar como defensor, en el que un hombre negro es acusado de violar a una mujer blanca.


FICHA DEL LIBRO

Mes: Marzo
Viñeta: Clásico
Libro: Matar a un Ruiseñor.
Autora: Harper Lee.
Nacionalidad: Estadounidense.
Año: 1960
Total de páginas: 416
Editorial: Zeta Bolsillo
Idioma original: Inglés.
Traductor: Baldomero Porta.
Género: Gótico sureño. Novela de aprendizaje.
ISBN: 9788490701218






DIVISIÓN DE LAS LECTURAS


Jueves, 8 de marzo de 2018
Jueves, 15 de marzo de 2018
Jueves, 22 de marzo de 2018
Jueves, 05 de abril de 2018.
Biografía de la autora.
Primera parte.
Final del capítulo 7.
Segunda parte.
Final del capítulo 14.
Segunda parte.
Final del capítulo 22.

Final segunda parte.
Página 88 del PDF
Página 196 del PDF.
Página 196 del PDF.
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SOBRE LA AUTORA

Harper Lee nació el 28 de abril de 1926 en Monroeville (Alabama), un pequeño pueblo del sur de Estados Unidos de solo 6500 habitantes y era empleada del departamento de reservas de una aerolínea hasta su llegada al mundo de la literatura.

Al igual que el escritor J. D. Salinger, Harper Lee no concedía entrevistas y vivió retirada en su localidad natal tras haber publicado una única novela, aunque el 5 de noviembre de 2007 (a los 81 años) viajó a Washington para recibir de manos del presidente de EE. UU. George W. Bush en la Casa Blanca la "Medalla Presidencial de la Libertad".

En febrero de 2015 la editorial de Lee, Harper Collins, anunció la publicación de la secuela de Matar un ruiseñor, titulada Ve y pon un centinela (Go, Set a Watchman), que se publicó el 14 de julio de 2015.

Matar a un Ruiseñor es una recomendación de Marlon Hernández.

FUENTES:
https://es.wikipedia.org/wiki/Matar_un_ruise%C3%B1or
https://www.casadellibro.com/libro-matar-a-un-ruisenor/9788490701218/2571283