Ésta es mi primera entrada oficial en este blog. Me ha tomado tiempo salir del closet, pero creo que esta fecha no podría ser más oportuna para hacerlo. Sé que es una opinión personal sobre el libro de abril, pero abril no puede ser abril sin recordar a un gran amigo, un escritor genial y sin duda un excelente maestro, me refiero a Rafael Menjívar Ochoa. Hoy se cumplen tres años desde que dejó de estar físicamente entre nosotros y qué mejor manera de recordarlo que escribir un comentario respecto de un libro de Borges.
Me ha tomado tiempo y esfuerzo retomar la disciplina de iniciar una lectura y concluirla, llevo a medias el libro de diciembre, el de enero no lo leí, comencé con Tólstoi y seguimos conversando; pero finalmente con Borges lo logré, eso me pone feliz.
Leí algunos cuentos de Ficciones cuando estudié el bachillerato, hace algunos años. La verdad es que no recordaba el contenido de los textos pero alguna idea tenía de la complejidad que encierran. El primer texto creo que fue el más difícil de digerir, pero ya para el segundo la lectura comenzó a fluir.
Y es que Borges no escatima cuando de hacer gala de cuanto recurso tiene a su mano se trata. Las referencias constantes a culturas orientales, a Europa y por supuesto a Argentina, dan cuenta de su paso por cada uno de esos lugares. La biografía de Borges fue un insumo valioso a la hora de sumergirse en cada uno de los cuentos.
He disfrutado con particularidad el último cuento de El jardín de senderos que se bifurcan, que es justamente el que lleva ese nombre, me parece que con ese texto Borges comienza a alejarse un poco del lenguaje denso sin dejar por ello de ser complejo. La segunda parte del libro la he disfrutado aún más; los cuentos: La forma de la espada, Tema del traidor y del héroe, La muerte y la brújula han sido de mis favoritos.
De los personajes, me da la sensación de estar siempre frente a la misma persona, en especial en la segunda parte del libro. Me encanta que el "héroe" nunca es un tipo extraordinario, más allá de la capacidad que tiene para reconocer sus propias falencias, y eso me ha permitido reír mucho ante frases que delatan al personaje en su momento de introspección.
En general, la narrativa de Borges me deja con la sensación de que sabe exactamente cuál será el final del cuento desde la primera palabra del texto. Es decir, cada letra va encaminada a un determinado desenlace que parece previsto desde antes de comenzar a escribirse. Los finales son sorprendentes, en algunos casos más que en otros, pero a la vez parece que no sería posible concebir un final distinto.
Espero hayan disfrutado de esta lectura tanto como yo.
¡Sandra, bienvenida! Qué buena nueva encontrarme con tu primer post en el blog del Club. Sin duda es oportuna la fecha que elegiste. No tuve el gusto de conocer personalmente a Rafael Menjívar Ochoa, pero he leído alguno de sus libros y he escuchado tantas anécdotas de Loida sobre La Casa del Escritor, que hasta se pudiera decir que de algún modo lo conozco. Puedo entonces imaginar cuanto ha significado para ustedes su amistad, sus enseñanzas, su influencia y su recuerdo.
ResponderEliminarPor otra parte, qué bueno que con el libro de este mes te has reencontrado con la feliz disciplina de iniciar una lectura y concluirla. Coincido con tus valoraciones de Borges y Ficciones. Para mi, Jorge Luis es parte de una contradictoria suerte de trinidad de argentinos que admiro sobremanera, aun cuando los dos restantes sean célebres por alguna otra actividad que, como bien diría Eduardo Saccheri, es "mucho menos importante, mucho menos trascendente, mucho más profana".
Borges es un imperdible literario. Los cuentos que más me han gustado de El jardín de los senderos que se bifurcan, son: Las ruinas circulares, La biblioteca de Babel y el relato homónimo de esa primera parte del libro. De Artificios me gustó mucho Funes el memorioso, La forma de la espada, El milagro secreto y El sur.
Gracias de nuevo por este post, que espero sea el primero de muchos.
¡Saludos!
Sandra,
ResponderEliminar¡Bienvenida!
Que bueno que te animaste finalmente a escribir tus apreciaciones en este espacio que es de todos.
La fecha no pudo ser más oportuna. Personalmente he estado con sensaciones encontradas todo el día, pero sentir que comparto los sentimientos de alegría y paz, así como los de tristeza y nostalgia con la gente que amo es, sin duda, muy reconfortante.
Leer a Borges ha sido para este club un salto de calidad y un reto. Hace años leímos El Aleph, pero como fue un opcional no todos se involucraron en la lectura. Recuerdo cómo me costó arrancar con ese libro. Lo mismo me pasó ahora con Ficciones. Pero luego te das cuenta que hay tantas cosas que no existen o que existen pero son tan eruditas, que lo mejor es disfrutar la lectura de corrido y no detenerse a "googlear" a cada rato, porque sino no se avanza o te da la impresión de saber nada.
Mi cuento favorito fue el "Jardín de los senderos que se bifurcan" de donde extraje una de las frases que más me han conmovido: "Un hombre puede ser enemigo de otros hombres, de los momentos de otros hombres, pero no de un país; no de las luciérnagas, palabras, jardines, cursos de agua, ponientes... "
Igual que Henry, espero que sea solo el primero de muchos post que te animes a escribir en este blog.
Un gran abrazo.