martes, 9 de agosto de 2022

Homo Deus: mi valoración personal


Hablar de Yuval Noah Harari suele desencadenar reacciones de interés, alboroto, polémica y, en algunos casos, de profundo desasosiego. 

El famoso historiador hebreo es reconocido como escritor best seller por sus obras Sapiens: de animales a dioses. Una breve historia de la humanidad y posteriormente Homo Deus: Breve historia del mañana, libro que nos ocupa en este caso. 

Habiendo leído ambos libros, he de reconocer que el autor tiene la virtud de volver interesantes y fluidos temas que muchos apenas conocíamos o que simplemente no gozaban de nuestro interés por ser percibidos como aburridos o difíciles de entender. El mérito del autor es dotarlos de sencillez y claridad suficientes como para que casi cualquier lector acceda a la información y la asimile en buena medida. Eso es de lo más satisfactorio en cuanto a la manera en que está escrito.

Ya sobre el contenido, en el caso de Sapiens no estuve de acuerdo con su enfoque sobre muchos aspectos del pasado prehistórico de la humanidad o con su interpretación particular sobre algunos acontecimientos que marcaron cambios significativos en la vida de nuestra especie en tiempos más recientes, pero admito que en todos los casos siembra la semilla que obliga a la consulta y a la reflexión sobre dichos tópicos. Sin embargo en Homo Deus, a pesar de mantener sus hilos interesantes, presentar muchos datos y proponer teorías sobre el futuro de la humanidad, encontré varios planteamientos que me parecieron sesgados y tendenciosos. 

Me parece por ejemplo que Harari subestima el impacto que tendría para la inmensa mayoría de los seres humanos tener que asimilar como verdad la inexistencia de Dios. Si un día viniera una nave espacial y de ella descendieran seres extraterrestres para darnos la noticia de que han recorrido de lado a lado el universo sin encontrar una evidencia de Dios, podemos estar seguros que la mayoría de los habitantes de este planeta se quebraría por dentro. Harari parece atribuir a la humanidad entera valores, capacidades y creencias que en realidad solo ostentan muy pocos humanos de avanzada en sociedades y clases pudientes y dominantes, olvidando que hay países y seres humanos de segunda y tercera línea, con un valor muy relativo para las naciones hegemónicas. El autor siempre parece medir las cosas desde la óptica de países y sociedades desarrolladas. De presunciones como esas es altamente probable que resulten falacias. De hecho Harari admite que las muestras de datos tomadas han sido obtenidas tan solo en sociedades educadas, industrializadas, ricas y democráticas del mundo occidental (WEIRD: Western, educated, industrialized, rich and democratic). 


No obstante, Harari me parece demasiado listo como para tomar sus planteamientos en esa línea como meros errores o desatinos. El historiador, ahora abordando temas de carácter científico, casi ha hecho una intrusión como divulgador sociológico, planteando predicciones que más bien inducen conceptos que poco a poco se van masificando hasta lograr un gradual condicionamiento y aceptación. De ahí que su reputación se ha ido posicionando exitosamente. Harari ha devenido en gurú e influencer de líderes mundiales de diversos ámbitos, que ya no solo leen sus libros sino que también lo invitan como orador y asesor en foros de importancia global. Las masas, en consecuencia, también han ido engrosando las filas de lectores de su obra, sobre todo si personalidades como Barack Obama o Bill Gates recomiendan encarecidamente su lectura. 

Si las propuestas de Harari llegan directamente a los líderes mundiales y permean en sus enfoques y opiniones, el potencial de que sus predicciones se vuelvan realidad es mucho más alto. La predicción pasa a convertirse en una inducción. Luego, el condicionamiento de las masas a las ideas donde Harari desmantela conceptos como la existencia individual, la consciencia del yo, el alma, la gestación del deseo y el libre albedrío, al tiempo que cuestiona el futuro de la democracia y de los derechos humanos, además de exaltar las ventajas de renunciar a la privacidad y compartir toda nuestra información personal a cambio de algunos beneficios que esto pudiera traernos; allana el camino para lo que se antoja como una inevitable implantación del futuro que describe. 

Luego, descreo de su refuerzo al argumento de que el cliente siempre tiene la razón. Las nuevas formas de gestionar mercados y productos clasifican a los clientes no solo según cuánto compran o con qué frecuencia lo hacen, sino también determinando cuántos recursos consume su gestión y cuánto desgaste representa atenderlos. Con eso en mira, habrá clientes que justificarán atenciones especiales, mientras que otros pueden incluso llegar a ser prescindibles. Discordo también cuando plantea que sin importar que todos los profesores de universidad y todos los sacerdotes y muláes gritasen desde todos los púlpitos que un coche es maravilloso, si los clientes lo rechazan es un mal coche. Harari parece obviar el asombroso poder de los influencers, ahora capaces de lograr que mercados multitudinarios compren verdadera basura. 

Harari también plantea que la sensibilidad no es una aptitud abstracta que se aprende leyendo libros. Los que apreciamos la lectura sabemos bien que este hábito puede ayudarnos a desarrollar cualidades como la comprensión, la empatía y la tolerancia. Al margen de si lo que leemos es real o ficticio, en cada libro disponemos de una ventana que nos permite observar a otras personas, en otros tiempos y lugares y, a partir de esa observación, profundizar nuestro conocimiento de la naturaleza humana tan solo viendo y analizando cómo otros reaccionan ante los eventos de sus propias vidas.

Pero donde realmente encontré una barrera perturbadora es en su afán por animalizar al hombre por completo, despojándolo de los rasgos que siempre consideramos como las facetas más elevadas y sublimes de la humanidad. Reducir la experiencia arrobadora de presenciar una gran obra de arte, de escuchar las erizantes notas de una gran composición musical o de vivir un amor profundo y trascendental a apenas impulsos bioquímicos que obedecen a un algoritmo funcional, me parece muy triste y lamentable. Al margen de mi visión personal sobre la existencia de un ser superior o de una fuerza creativa misteriosa que excede mis capacidades de comprensión, siempre he creído que hay una llamita especial en el ser humano, a lo mejor desperdiciada por la mayoría, pero que resulta insoslayable cuando la contemplamos en la vida y obra de grandes figuras de la historia de nuestra especie. 

La chispa inicial que da paso a la vida desde la materia inanimada sigue siendo un misterio aún para la ciencia más avanzada. El hombre ha jugado con mucho éxito a ser dios desde la manipulación genética, la modificación celular, la fertilización in vitro o la generación de órganos a partir de células madre. Pero la ciencia aún no ha podido crear vida desde cero. Esa es la última frontera, probablemente el último hálito que sostiene la creencia en el soplo de vida que animó al muñeco de barro. Acaso esa chispa que revelaría el origen divino resida en algún punto de los estados de la mente que el mismo Harari reconoce como un océano inexplorado.

Sé que es muy probable que la humanidad se encamine al final de su ciclo y que lo que viene sea una sociedad de cyborgs, superhumanos o máquinas. Es bastante lógico pensar que cada vez habrá menos humanos útiles para la nueva realidad de la vida en este u otro planeta y que la individualidad puede sucumbir cuando todos acabemos conectados sin cables ni prótesis a un único cerebro satelizado que nos gobierne de manera centralizada. De una manera u otra, el futuro (y no solo el propuesto por Harari) es poco alentador y bastante desprovisto de esperanza. Por como corren los tiempos, ya quisiera uno refugiarse en la perspectiva quijotesca y romántica que proponía John Connor en la famosa saga futurista: “El futuro no está establecido. No hay destino. Solo existe el que nosotros hacemos.”

lunes, 8 de agosto de 2022

Todos los cuentos | Gabriel García Márquez

 


Todos los cuentos | Gabriel García Márquez

“Aquella vez empezó a notar la presencia de «el otro». Lo imaginaba en todas partes.  Metido en los rincones, detrás de las puertas; espiando cada uno de sus gestos, cada movimiento suyo. Alcanzaba a ver la forma escurridiza, la huida precipitada. En el comedor «lo» veía fugarse después de haber derramado un frasco de láudano sobre los alimentos”

Pasaje de Todos los cuentos (Spanish Edition)

Gabriel García Márquez


Es de mis mayores alegrías llegar a agosto, no solo por las vacaciones sino por la lectura de este mes, que muy honrada me siento de presentar el libro de este escritor querido y reconocido por ser el padre del realismo mágico, nada más y nada menos que Gabriel Garcia Márquez con su libro “Cuentos reunidos”. Espero que este libro nos haya acompañado en las vacaciones y todo el mes como un susurro en nuestro oído y colores a nuestros ojos.

¿Por qué propuse este libro? Pues me llamó la atención que Carlos Andrés (mi esposito) lo tenía en sus reliquias antiguas y al abrir la primera página dice: "Me lo regaló Andrés (abuelo) en navidades de 1984". Y bueno faltaba mas, les dejo la foto.


Gracias a este club me he llevado muchas sorpresas con la viñeta “cuentos”, ya que siempre estigmaticé que era solo para niños o que no tenían historias mayor relevancia por el contenido corto. Sin embargo, personalmente he leído varias joyitas. Por ello espero les gusten estos cuentos tan especiales, crudos y líricos que van a deleitarnos este mes de agosto.

Los libros del Gabo que hemos leído y valorado son libros con dolor, asombro, felicidad, esperanza y tristeza; desde Cien años de soledad y Crónica de una muerte anunciada hasta Todos los cuentos. Por más que digamos que hay escritores de escritores, todos sabemos lo bueno que es él, su Nobel de 1982 nos lo dice.

Muchos hablan de que sus cuentos son mejores que sus novelas. Yo se lo dejo al club, a sus comentarios, descubramos que encontramos en ellos.

Entre 1947 y 1955, Gabo escribe y publica once cuentos, entre los que se destacan La tercera resignación, su primer relato -fuertemente inspirado por la literatura de Franz Kafka-, Ojos de perro azul y Monólogo de Isabel viendo llover en Macondo, donde se hace referencia por primera vez al pueblo que luego sería el escenario central de su obra: Macondo.

¿Qué es el realismo mágico?

Como autor de ficción, García Márquez es siempre asociado con el realismo mágico. De hecho, es considerado, junto al guatemalteco Miguel Ángel Asturias, figura central de este género. El realismo mágico se usa para describir elementos que tienen, como es el caso en los trabajos de este autor, la yuxtaposición de la fantasía y el mito con las actividades diarias y ordinarias.

El realismo es un tema importante en todas las obras de García Márquez. Él dijo que sus primeros trabajos (con la excepción de La hojarasca), como El coronel no tiene quien le escriba, La mala hora y Los funerales de la Mamá Grande, reflejan la realidad de la vida en Colombia y este tema determina la estructura racional de los libros. Dice: «No me arrepiento de haberlas escrito, pero pertenecen a un tipo de literatura premeditada que ofrecen una visión de la realidad demasiado estática y exclusiva».


El Gabo y sus cuentos

Resulta normal, y hasta casi lógico, que al pensar en la figura de Gabriel García Márquez (Aracataca, Colombia, 6 de marzo de 1927 – Ciudad de México, México, 17 de abril de 2014) lo primero que se nos venga a nuestra mente sea la imagen del gran novelista, ganador del Premio Nobel de Literatura en el año 1982. Esto es algo incuestionable, porque desde La hojarasca (1955) hasta Memoria de mis putas tristes (2004), pasando por la mítica Cien años de soledad (1967), o por cualquiera de sus otras siete novelas, el escritor colombiano se ganó, tanto dentro de la crítica literaria como entre los lectores, el reconocimiento de gran novelista. 

No obstante esto, se podría decir, que lo que forma la base de su gran literatura son los relatos cortos, los cuentos. Las historias breves, dentro de la literatura de Gabo, están presentes, no solo en los cuatro libros de cuentos que encontramos dentro de su obra, sino también en la gran mayoría de novelas, en los guiones cinematográficos y en su vasta obra periodística. El propio autor reconoció, en más de una oportunidad, que para él son las “pequeñas historias” las que hacen interesante y fantástico al mundo. 

En su libro de memorias, Vivir para contarla (2002), como en numerosas entrevistas, García Márquez refirió cómo las anécdotas de antiguas guerras referidas por su abuelo, un coronel a quien llamaba Papalelo y los relatos fantásticos de apariciones que le contaban las mujeres de su casa, se conjugaron en su mente y pasaron a ser un material primario e importantísimo de su universo literario. 

Si bien es cierto que García Márquez comenzó su andanada literaria, como tantos otros escritores, con la poesía y después escribió algunos comentarios humorísticos, las primeras producciones literarias importantes fueron sus cuentos. El primero que registran sus memorias, es el titulado Psicosis obsesiva, un relato fantástico, de su época de estudiante de bachillerato en el Liceo Nacional de Varones de Zipaquirá. A partir del año 1947, el más reconocido de los autores colombianos, comienza a escribir relatos breves, cuentos, de forma más sistemática. Los primeros fueron publicados por el diario El Espectador de Bogotá, van desde el año 1947, con la publicación de La tercera resignación, el 13 de septiembre de 1947, hasta el año 1955. Estos primeros relatos fueron reunidos y publicados en forma de libro, recién en el año 1974, en la obra titulada Ojos de perro azul. 

Posteriormente a la etapa bogotana, encontramos los relatos escritos en la costa colombiana, cuando García Márquez se desempeñaba como periodista en Cartagena de Indias y en Barranquilla. De esta época es el cuento Un día después del sábado, relato que obtuvo el primer premio de un concurso organizado por la Asociación de Escritores y Artistas de Colombia, y que figura en el libro Tres cuentos colombianos, publicado en el año 1954. 

Del año 1959, cuando García Márquez ya se encontraba nuevamente radicado en Bogotá, es el cuento Los funerales de la Mamá Grande. Este relato extenso, antecedente claro de Cien años de soledad, forma parte de un libro que lleva su mismo nombre, publicado en el año 1962. 

A finales de la década del 60, el Nobel colombiano comenzó a escribir una serie de cuentos, que algunos estudiosos de su obra dicen que estaban destinados a un libro de historias infantiles que nunca publicó. Estos relatos, junto con otras historias, pensadas en un principio como guiones cinematográficos, fueron publicados en el año 1972, bajo el título de: La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y de su abuela desalmada. 

El último libro de cuentos de Gabriel García Márquez se publicó en el año 1992, bajo el título de Doce cuentos peregrinos. Son relatos de inmigrantes latinoamericanos en el viejo continente, un libro que García Márquez decidió publicar el año en que se festejaron los 500 años de la llegada de los europeos al continente americano.

FICHA DEL LIBRO

Título: Todos los cuentos

Autor: Gabriel García Márquez

Editorial/Sello: Vintage Español, una división de Penguin Random House

Número de páginas: 456

Año de publicación original: 1973



Todos los cuentos es una propuesta de Soledad Rivera.


DIVISIÓN DE LECTURAS




Metas de lectura

Todos los cuentos se comentará en cuatro reuniones, los jueves 11, 18 y 25 de agosto, y el jueves 1 de septiembre.

El 4 de agosto tendremos meta de lectura, pero no habrá reunión por motivo de las vacaciones agostinas en El Salvador.


EL AUTOR



Gabriel José de la Concordia García Márquez (Aracataca, 6 de marzo de 1927-Ciudad de México, 17 de abril de 2014) fue un escritor y periodista colombiano. Reconocido principalmente por sus novelas y cuentos, también escribió narrativa de no ficción, discursos, reportajes, críticas cinematográficas y memorias. Fue conocido como Gabo, y familiarmente y por sus amigos como Gabito. En 1982 recibió el Premio Nobel de Literatura​ «por sus novelas e historias cortas, en las que lo fantástico y lo real se combinan en un mundo ricamente compuesto de imaginación, lo que refleja la vida y los conflictos de un continente».

Producción literaria

Novelas

La hojarasca (1955)

El coronel no tiene quien le escriba (1961)

La mala hora (1962)

Cien años de soledad (1967)

El otoño del patriarca (1975)

Crónica de una muerte anunciada (1981)

El amor en los tiempos del cólera (1985)

El general en su laberinto (1989)

Del amor y otros demonios (1994)

Memoria de mis putas tristes (2004)

Cuentos

Los funerales de la Mamá Grande (1962)

La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y de su abuela desalmada (1972)

Ojos de perro azul (1972, recopilación de sus primeros cuentos)

Doce cuentos peregrinos (1992)

Narrativa de no ficción

Relato de un náufrago (1970)

La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile (1986)

Noticia de un secuestro (1996)

Periodismo

Cuando era feliz e indocumentado (1973)

Chile, el golpe y los gringos (1974)

Crónicas y reportajes (1976)

De viaje por los países socialistas (1978). Fue re editado por Penguin Random House en 2015 bajo el título De viaje por Europa del Este.

Periodismo militante (1978)

Obra periodística 1. Textos costeños (1948-1952) (1981)

Obra periodística 2. Entre cachacos (1954-1955) (1982)

Obra periodística 3. De Europa y América (1955-1960) (1983)

La soledad de América Latina. Escritos sobre arte y literatura 1948-1984 (1990)

Primeros reportajes (1990)

Obra periodística 5. Notas de prensa (1961-1984) (1991). La primera edición incluía notas de 1980 a 1984; a la de 1999 se le agregaron una nota de 1961, otra de 1966, tres de 1977 y una de 1979.

Obra periodística 4. Por la libre (1974-1995) (1999)

El amante inconcluso y otros textos de prensa (2000). Selección de notas publicadas en la revista Cambio.

Gabo periodista (2013). Panorámica de su obra periodística antologada y comentada por varios de sus colegas.

Gabo. La nostalgia de las almendras amargas (2014). Notas y respuestas a lectores publicadas en la revista Cambio.

Gabo contesta (2015). Respuestas a los lectores de la revista Cambio.

El escándalo del siglo (2018). Edición y selección de Cristóbal Pera y prólogo de Jon Lee Anderson.

Memorias

Vivir para contarla (2002)

Teatro

Diatriba de amor contra un hombre sentado (1994)

Discurso

Nuestro primer premio Nobel (1983)

La soledad de América Latina / Brindis por la poesía (1983)

El cataclismo de Damocles (1986)

Un manual para ser niño (1995)

Por un país al alcance de los niños (1996)

Cien años de soledad y un homenaje (2007), con Carlos Fuentes.

Yo no vengo a decir un discurso (2010)

Cine

Viva Sandino (1982). Guion. También publicado como El asalto (1983) y El secuestro (1984).

Cómo se cuenta un cuento (1995). Taller.

Me alquilo para soñar (1995). Taller.

La bendita manía de contar (1998). Taller.

Entrevistas

García Márquez habla de García Márquez en 33 grandes reportajes (1979). Recopilación y prólogo de Alfonso Rentería Mantilla

El olor de la guayaba (1982). Con Plinio Apuleyo Mendoza.

Protagonistas de la literatura hispanoamericana (1985). Con Emmanuel Carballo.

Textos anexos a Gabriel García Márquez. La escritura embrujada (2005). Con Yves Billon y Mauricio Martínez Cavard. Versión completa de la entrevista presentada en el documental La escritura embrujada (1998).

Para que no se las lleve el viento (2011). Recopilación y prólogo de Fernando Jaramillo

Tratos y retratos (2013). Con Silvia Lemus. Transcripción de la entrevista televisiva que Lemus realizó a García Márquez en Cartagena, en 1992.

Diálogo

La novela en América Latina. Diálogo (1968). Con Mario Vargas Llosa. Transcripción de la charla que sostuvieron ambos escritores en la Universidad Nacional de Ingeniería, en Lima, el 5 y el 7 de septiembre de 1967. Hay ediciones peruanas de 1968, 1991, 2003, 2013 y 2017. Alfaguara lanzó el libro en 2021 bajo el nombre Dos soledades. Un diálogo sobre la novela en América Latina.

Premios y reconocimientos

Premio Nobel. García Márquez recibió el Premio Nobel de Literatura en 1982, según la laudatoria de la Academia Sueca, «por sus novelas e historias cortas, en las que lo fantástico y lo real son combinados en un tranquilo mundo de imaginación rica, reflejando la vida y los conflictos de un continente».

Su discurso de aceptación fue titulado La soledad de América Latina. Fue el primer colombiano y el cuarto latinoamericano en ganar un Premio Nobel de Literatura, después de lo cual declaró: «Yo tengo la impresión de que al darme el premio han tenido en cuenta la literatura del subcontinente y me han otorgado como una forma de adjudicación de la totalidad de esta literatura».

García Márquez ha recibido muchos otros premios, distinciones y homenajes por sus obras como los mencionados a continuación:

Primer Premio en el concurso de la Asociación de Escritores y Artistas, por su cuento Un día después del sábado (1955).

Premio de la Novela ESSO por La mala hora (1961).

Doctor honoris causa de la Universidad de Columbia en Nueva York (1971).

Premio Internacional Neustadt de Literatura (1972).

Premio Rómulo Gallegos por Cien años de soledad (1972).

Premio Jorge Dimitrov por la Paz (1979).

Medalla de la Legión de Honor de Francia en París (1981).

Condecoración Águila Azteca en México (1982).

Premio cuarenta años del Círculo de Periodistas de Bogotá (1985).

Miembro honorario del Instituto Caro y Cuervo en Bogotá (1993).

Museo: El 25 de marzo de 2010 el gobierno colombiano terminó de reconstruir la casa en que nació García Márquez en Aracataca, pues había sido demolida cuarenta años atrás, e inauguró en ella un museo dedicado a su memoria con más de catorce ambientes que recrean los espacios en los que transcurrió su niñez.

En el Este de Los Ángeles (California), en el municipio de Las Rozas de Madrid y en Zaragoza (España) hay calles que llevan su nombre.

En Bogotá el Fondo de Cultura Económica de México construyó un centro cultural que lleva su nombre, inaugurado el 30 de enero de 2008[6].

En 2015, el Banco de la República de Colombia anunció una nueva serie de billetes en donde aparecerá su imagen, más exactamente en el billete de $50.000 pesos que iniciará su circulación en el 2016.

Fuente:

https://culturamas.es/2016/04/25/gabriel-garcia-marquez-y-el-cuento/

https://es.wikipedia.org/wiki/Gabriel_Garc%C3%ADa_M%C3%A1rquez#Realismo_m%C3%A1gico