"El reto para quien escribe es llenar la distancia entre lo que vives y lo que cuentas, sentir físicamente el impacto de la narración, acercar el pasado de las personas a las que hemos querido, de las vidas ajenas tal como las hemos observado... Una historia, para tener forma, tiene que cruzar muchas barreras. A menudo, empezamos a escribir demasiado pronto, y las páginas aún están frías. Solo cuando la historia se acopla a nosotros como un guante, ha llegado el momento de contarla."
Elena Ferrante
Una amiga no nos cambia, pero sus cambios se unen discretamente a los nuestros en un continuo y recíproco esfuerzo de adaptación. Elena Ferrante |
La amiga estupenda
Junio de 2022
Club de la Buena Estrella
Una recomendación de Loida Pineda
SINOPSIS
Se trata del primer libro de la tetralogía Dos amigas que tiene como telón de fondo la ciudad de Nápoles a mediados del siglo pasado y como protagonistas a Nanú y Lila, dos jóvenes mujeres que están aprendiendo a gobernar su vida en un entorno donde la astucia, antes que la inteligencia, es el ingrediente de todas las salsas. La relación a menudo tempestuosa entre Lila y Nanú tiene a su alrededor un coro de voces que dan cuerpo a su historia y nos muestran la realidad de un barrio pobre, habitado por gente humilde que acata sin más la ley del más fuerte, pero La amiga estupenda es mucho más que un trabajo de realismo social: lo que aquí tenemos son unos personajes de carne y hueso, que intrigan al lector y nos deslumbran por la fuerza y la urgencia de sus emociones.
Correspondiente a la viñeta "Literatura italiana", el libro La amiga estupenda (Traducción del título "L'amica geniale") de Elena Ferrante, nos conduce por las calles de un barrio pobre de la ciudad de Napoles en los años sucesivos a la segunda postguerra del siglo XX.
Elena Ferrante
Escritura y anonimato
El seudónimo Elena Ferrante se presentó en las librerías italianas en 1992, pero fue en 2012 cuando se empezó a hablar de lo que se conoce como el fenómeno Ferrante con la publicación de la primera novela de su tetralogía Dos amigas, que rápidamente se convirtió en un éxito de ventas internacional.
Al momento de hablar de sus personajes aparece una certeza que puede comprobarse en sus ficciones en las que no hay malos o buenos, extremos observados con una vara moral.
Dos amigas
La
tetralogía Dos amigas, protagonizada por Lila y Lenù dentro de
un universo napolitano en el que la autora se hace cargo de la época, de los
conflictos de cada período y de las decisiones de dos mujeres que desafían a su
clase para proyectar destinos diferentes -fundamentalmente- a los de sus madres.
Anonimato
No son pocos los autores a lo largo de la historia que, por
distintas razones, han recurrido a un seudónimo para dar a conocer sus obras.
El diácono
anglicano Charles Lutwidge Dodgson, firmó “Alicia en el país de las maravillas” (1865), su
obra más conocida, como Lewis Carrol. Lo hizo porque quería separar su vida
privada de la literaria, lo mismo que George Orwell, que adoptó su seudónimo
para no avergonzar a sus padres. A veces el
éxito ha enmascarado el nombre
real de muchos autores. Que J.K Rowling firmase con nombre de hombre una novela
para adultos en 2013, solo tuvo que ver con intentar huir de la fama. Entonces
fue Robert Galbraith.
A
propósito de este punto, encontré algo que ella dijo en una de las pocas
entrevistas (vía correo electrónico) que ha concedido.
“Un lector debe establecer con un texto una relación de confianza. La atención mediática que está totalmente fundada en dar cuerpo y voz a la estrella del momento ha acostumbrado a los lectores a la idea que cuenta más el contacto con la miserable existencia del productor de las obras que con la obra misma. Escaparse de esta forma, se desvía de la confianza, la daña. De otra parte, no siento que pueda comunicarme de otro modo sino es escribiendo. El hecho de no aparecer no sirve para procurarme lectores, sino para escribir en libertad”.
Elena Ferrante
Esa respuesta tan auténtica me hizo reflexionar sobre mi propio
hacer como lectora, como buena militante de este club, estoy acostumbrada a
conocer de antemano al autor o autora de la obra que leo y agradezco el tiempo
que en el club dedicamos para escudriñar biografías intentando descubrir detalles
y -por qué no- algún desliz de los autores que leemos, al esfuerzo por conseguir
organizar conversatorios y la oportunidad de hacer alguna pregunta o hacernos
de un autógrafo en el ejemplar que hemos leído y todo eso siempre me ha parecido
bueno, emocionante y a la vez un auténtico plus al mero placer de leer.
Sin embargo, sobre Elena Ferrante no solo nosotros, sino todo el
universo que la lee tiene que conformarse hasta el momento con la especulación
que en ciertos aspectos llega a ser más bien una adivinación misteriosa e
intrigante respecto a prácticamente todos los aspectos sobre quién es, qué edad tiene, se ha casado, cuántas veces, es madre, no lo es, tiene familia, hermanas, hermano, pero no sabemos nada, solo puras ataduras de cabos. Por ejemplo,
se especula que es napolitana, que es madre, se llegó a pensar que incluso no
es una mujer, o que no es una sola persona sino tal vez una pareja que escribe
a dos manos, etc.
Si nos ponemos a buscar un poco en Internet sobre la identidad de
Elena Ferrante, podemos encontrar el trayecto de una verdadera cacería, el
interés por saber quién se escondía detrás del seudónimo y la presión sobre sus
editores, Sandro Ferri y Sandra Ozola, para que lo desvelaran ha llegado a
límites de locura: detectives,
periodistas, exposición de cuentas bancarias, hackeo de redes sociales, creo
que si vamos más allá probablemente habrá consultas con adivinos, preguntas a
las cartas del tarot, estudio de los astros en el firmamento, y quien sabe qué
cosas más, todo para evitar que una personas que decide ser anónima lo consiga,
después de todo vivimos los tiempos donde la exposición pública es prácticamente una
forma de vida y al parecer el anonimato se considera una especie de traición.
Al respecto, varios nombres salieron a la luz a lo largo de los
años, el más pujante es el de Anita Raja, la directora de la serie Azzurri que
había publicado L'amore molesto, pero también se sospecha de Goffredo Fofi,
consultor, traductor y amigo íntimo de los editores Sandro Ferri y Sandra
Ozzola. Otros recurrentes son Domenico Starnone, marido de Raja, Fabrizia
Ramondino y Michele Prisco.
El periodista italiano Claudio Gatti inició una investigación para
descubrir quién era en realidad Elena Ferrante llegando en 2016 incluso a publicar un reportaje sobre las cuentas de la editorial E/O para demostrar que
la traductora italiana Anita Raja era la misma persona que Ferrante. Esa información llegó a ser confirmada desde el
perfil de Twitter de Anita Raja, aunque después se supo que había sido el
periodista Tommaso Debenedetti, conocido por publicar entrevistas falsas con
famosos, quien la había suplantado en la red social. Ni la editorial ni la
propia Anita Raja han confirmado al sol de hoy nunca estas afirmaciones.
Personalmente pienso que dedicar más tiempo a especular sobre el misterio de la identidad
privada de Elena Ferrante que a conocer su obra, me aleja del objetivo de la misma autora al escribir y por tanto, no voy a hacer conclusiones respecto a si es esta u
otra persona, no daré por sentada ninguna de las teorías, no voy a asumir que
sí es tal persona, más allá del hecho de que sí creo que se trata de una mujer,
fuera de eso, el asunto de quién es Elena Ferrante para mí, queda cerrado.
“Si mañana me dijeran que Elena Ferrante es un hombre o que Elena Ferrante es un grupo de personas, me sentiría perdida, pensaría que quizá no soy tan buena lectora si no he podido leer entre líneas, ver engaño. Pensaría que hay algo misógino y perverso en la idea de encerrar la literatura en un seudónimo femenino cuando tantas, tantísimas veces a lo largo de la historia las mujeres han tenido que esconderse para escribir. Y al mismo tiempo, poco me importa la identidad de Ferrante porque sus libros estarán siempre conmigo, y Lenù y Lila están tan dentro de mí como la Jo March de Louisa May Alcott, la Elizabeth Bennett de Jane Austen o la Andrea de Laforet, todas ellas “chicas raras” como yo.”
Carmen G. de la Cueva, Periodista, escritora y editora.
Ficha técnica de LA AMIGA ESTUPENDA
Estos son algunos de sus libros publicados. Además hay literatura infantil y artículos.
2022
2020
2019
2018
2017
2015
2014
2012
2012
2011
(2015)
2004
(2018)
BIBLIOGRAFÍA
Lecturalia
El País
Télám
Wikipedia
Revista
Librújula
Revista CTXT
Como una colaboración con mi amiga Loida he preparado esta entrada, aunque ella fue quien propuso y modera el libro. Esta es una publicación de María Ofelia Zúniga, con la revisión de Loida Pineda y con mucho cariño para los miembros del Club de la Buena Estrella.
Muchas gracias por leerla.