
San Salvador, 28 de Julio, 2017
Antes de todo debo confesarte que
no había tomado las cosas muy en serio. Ponerme una pistola en la cabeza y escupir algunas palabras sobre mi falta de tacto o conocimiento sobre con quién
estaba lidiando realmente no es una estrategia para presionarme a escribir.
Por un momento, y lo admito, el haber encontrado muertos a unos cuantos compinches estuvo a punto de doblegarme, pero al pensar fríamente sobre...