jueves, 12 de octubre de 2017

Conversatorio con Mauricio Orellana Suárez

Amigos del Club de la Buena Estrella, se llegó el momento tan esperado. El día del conversatorio con el autor salvadoreño Mauricio Orellana Suárez. Tendremos el privilegio de conversar con él sobre su experiencia en la elaboración del libro "Kazalcán y los últimos hijos del Sol Oculto", lectura del mes de septiembre de 2017 en este club.

¡Allá nos vemos!


domingo, 8 de octubre de 2017

Kazalcán y los últimos hijos del Sol Oculto, ayudas visuales II

Buenas noches amigos del Club:

Quiero compartir con ustedes otra serie de figuras que hice del libro del mes de septiembre: "Kazalcán y los últimos hijos del Sol Oculto". Además de atender a sucesos importantes dentro de la lectura, me tomé el atrevimiento de tomarle la palabra a Loida y hacer la organización de los 7 Señoríos descritos. Espero les sea de utilidad a los que todavía no han terminado el libro.

Y estaré pendiente por si algunos de ustedes tienen modificaciones a las figuras.

¡Saludos!








































miércoles, 4 de octubre de 2017

Kazalcán, Mecatl y los amoxpouani de Qualli Citlalzin

Relato meta-ficticio basado en el libro "Kazalcán y los últimos hijos del Sol Oculto" 

Un mes antes del equinoccio de otoño, Hulualcón comenzó a escuchar con insistencia un nombre proscrito hace milenios. Como en sueños o evocaciones lejanas, la palabra escapaba de largos silencios, traspasaba los portales del inframundo que el semidiós resguarda por voluntad de los dioses, llegaba a sus oídos y hacía eco en su memoria: "Kazalcán... Kazalcán... Kazalcán".

— Los hijos indignos de la tierra finalmente han dado con el nombre —pensó el guardián, engendro de cadejo y sacerdotisa—, de nuevo tienen otra oportunidad.

Desterrado del paraíso por robar el códice sagrado para salvar a la isla Nebí del juicio de los dioses, el ignominioso héroe Kazalcán había sido condenado en su lugar a la muerte en vida, el olvido. Apenas hablarían de él en su propia generación. Tres generaciones más tarde nadie lo recordaría. Desde entonces, destinados a ser anónimos granos de arena en interminables playas de hombres de paso, los hijos del clarinero y la montaña, sus hijos, han nacido y muerto a millones durante esta era oscura cuyo designio ignoran. No hay más auspicios ni oráculos, perdido está el códice sagrado y apagada la flama que reza el futuro. Reducidas a ruinas han quedado las edificaciones de gloriosos templos de otros presentes, donde sus viejos altares ya han olvidado la roja vertiente de corazones sacrificados, del mismo modo que olvida el hambre de hoy al alimento de ayer.

— Nadie hay en esta raza decadente e incrédula, digno de hablar con el fuego y capaz de aprender lenguas de dioses —dice Muoc a Kunamphú—. Están demasiado lejos de tradiciones extintas hace milenios. Sin embargo, aún hay esperanza. Por la más densa de las oscuridades hay que pasar antes de ver a Topuc renacer victorioso desde las profundidades de la noche. Existe otra forma de fuego que puede inspirar a otra suerte de auspicio y revelar a través de él antiguos secretos sagrados e historias fundamentales.

— Uno hay que he visitado en sueños —continúa Muoc—, en cuyos sentidos he puesto las imágenes y las experiencias de los últimos hijos del Sol Oculto, mismas que él luego escribe cuidadosamente al despertar.

— Sé de quien hablas —dice Kunamphú mientras asiente—. Su nombre nada tiene que ver con las lenguas ancestrales de los siete señoríos del jaguar, cuyos territorios fueron corrompidos por la llegada de hombres pálidos, que impusieron su propia lengua y costumbres hasta el grado de confundir la identidad de los hijos de este suelo, replegada hoy al escondido torrente de sus venas; pero es un hecho que este hombre ha nacido en esta tierra bañada por las aguas de Ampolutzé y Columpumphé, y que su devoción por escribir lo que el fuego sagrado le inspira, lo vuelve digno de convertirse en la soga que unirá al hombre de hoy con sus ancestros olvidados. De ahora en más, lo llamaremos Mecatl.

Kunamphú emite el edicto alzando el mentón y hundiendo la mirada en el oscuro manto de Xilá, cuyas estrellas semejan diamantes de lejano fulgor, adornos luminosos de la dimensión donde habitan en calidad de guardianes de lo sagrado los otrora Auspicio y Sacerdote Supremo.

Desde el firmamento de Xilá, Muoc induce e inspira a Mecatl, quien ignorando su nuevo nombre y desconociendo los elevados propósitos que está destinado a cumplir, sigue escribiendo con detalle lo que en sueños Muoc va sembrando en sus sentidos.

Escribe —musita Muoc al oído de Mecatl—, escribe. El hombre de hoy debe leer los códices que ha heredado de sus ancestros, y escuchar con atención al pasado para poder expiar sus yerros. Ese ha de ser su propio peregrinaje caminando de espaldas hasta encontrarse.

Impelido por la firme voluntad de los guardianes de lo sagrado, Mecatl escribe las gestas de Kazalcán y los últimos hijos del Sol Oculto. Ignora el profeta jaguar que ha quedado en el medio de fuerzas colosales en pugna eterna, que la sombra de malignos querques y plumas de urubú se cierne siniestra para impedir que el códice vea la luz. Pero la verá, por Topuc que lo hará. Los poderes oscuros no pueden detener la llegada del día, y en el templo de Uruk, bajo el signo de Sulayom, el fuego revelador se inscribe en las sagradas páginas.

Hasta las manos y la vista de los amoxpouani de Qualli Citlalzin (los lectores de la Buena Estrella), ha llegado el códice. Por un mes, cada siete días se han reunido para repasar las historias del Sol Oculto. El equinoccio de otoño los ha encontrado repitiendo el nombre proscrito hace milenios: "Kazalcán... Kazalcán... Kazalcán". La reunión con Mecatl ahora es imperiosa, el día y el lugar ya han sido señalados.

Cutzí, la tierra, se ha sacudido varias veces renegando de sus hijos indignos, plaga terrible, insaciables demonios incapaces de vivir en paz con ellos mismos o con los otros. Axpal, el viento, ha expulsado a las nubes del cielo; quiere hablar a solas con Ilhuitl, el día. La era oscura está por terminar...

domingo, 1 de octubre de 2017

El espía que surgió del frío, John Le Carré



"Por si no se han dado cuenta, fue el hombre quien puso fin a la guerra fría. No fueron las armas, ni la tecnología, ni los ejércitos, ni las campañas. Fue, sencillamente, el hombre. Y ni siquiera fue el hombre occidental, sino nuestro implacable enemigo del Este el que se tiró a la calle e hizo frente a las balas y las porras diciendo: ya basta. Fue su emperador, no el nuestro, quien tuvo el valor de subir a la tribuna y declarar que estaba desnudo. Y las ideologías fueron a remolque de estos acontecimientos imposibles como cuerdas de presos, como siempre les ocurre a las ideologías cuando han caducado".  
John Le Carre

Llegado el mes de octubre, nos adentramos en el suspenso. Es tiempo de prepararnos para iniciar un camino de intrigas y conspiraciones de la mano de John Le Carré. Un Le Carré cómodo y confiado en lo que hace, porque no escribe sobre fantasía, sus personajes y sus mundos no surgen puramente de su imaginación; él ha estado allí, inmerso en el mundo del espionaje. 

Cual Dr. Jekyll y Mr. Hide, David Cornwell y John Le Carré son un mismo hombre, dos personalidades que luchan por ser distanciadas, pero sin embargo entretejidas en un mismo ser.  Mientras Cornwell estaba siendo promovido a primer secretario de Foreign Office del servicio secreto inglés en Alemania, su alter ego estaba cosechando un éxito impresionante por el libro El espía que surgió del frio. El duelo lo ganó Le Carré. Cornwell renunció a su cargo para dedicarse de lleno a la literatura.

Y este libro que es un parteaguas en la vida de Le Carré, es con el que vamos a convivir este mes. Un libro que ha sido nominado por muchos como la mejor novela de espionaje de todos los tiempos, contando entre ellos al escritor Graham Greene. Parece un epíteto exagerado, tomando en cuenta la extensa variedad de libros publicados en este género, así que será interesante leer este libro como club para emitir nuestro propio juicio sobre el tema.


SINOPSIS

Alec Leamas, el antiguo responsable del espionaje inglés en Alemania Oriental, tiene una cuenta casi personal que saldar con sus viejos rivales. Todos sus agentes han muerto o han sido detenidos. Pero Londres le ofrece la oportunidad de superar su frustración mediante una operación sucia y arriesgada que permitirá liquidar al máximo dirigente del espionaje de Alemania Oriental. Y Alec Leamas acepta el riesgo y la sordidez de la operación. Es un buen espía, un profesional, y sabe que el doble juego, o triple, forma parte de las reglas. Sin embargo, a medida que se adentra en la trama, va comprendiendo que aquél no es su juego, que no encarna el papel de un héroe en busca de rehabilitación, sino el de un pobre peón caído en desgracia que está siendo manipulado en algo más sucio y arriesgado de lo que nunca hubiera estado dispuesto a asumir.

FICHA DEL LIBRO



Mes: Octubre
Viñeta: Suspenso/Terror
Libro: El espía que surgió del frío
Autor: John Le Carré
Nacionalidad: Inglés
Año: 1963
Total de páginas: 248
Editorial: Pan Books/De bolsillo
Idioma original: Inglés
Género: Novela
ISBN: 9788497930505






DIVISIÓN DE LECTURAS

Jueves 5
Jueves 12
Jueves 19
Jueves 26
Hasta el capítulo VI Contacto
Hasta el capítulo XI. Amigos de Alec
Hasta el capítulo XIX. Reunión de Sección
FINAL
25% Aprox.
50% Aprox.
75% Aprox.
100%

SOBRE EL AUTOR




John le Carré es un hombre que es una personalidad importante no solo como escritor sino también como espía. Británico, crítico social importante, sus opiniones son escuchadas por buena parte de la población inglesa. Le dio vuelta a la forma de escribir novelas de suspenso, presentando a los espías del este y del oeste como dos partes de una misma moneda, cuando antes de él se acostumbraba a tomar al espía occidental como el bueno de la película y el oriental como el malo.

El verdadero nombre de John Le Carré es David Cornwell, quien nació el 19 de octubre de 1931 en Poole, Dorset, Inglaterra. Su padre era un estafador y arribista, que fue preso cuando Le Carré tenía dos años y su madre abandonó el hogar 3 años después, dejando a David en la orfandad. Resultado de esto, Cornwell pasó gran parte de su niñez y adolescencia en internados, de los que le quedan como recuerdos las golpizas propiciadas por otros miembros de la facultad. David escribió a su hermano sobre esto en una carta “éramos unos niños completamente fríos y siempre lo seremos”.

Migró a Suiza a estudiar en la universidad de Bern donde fue reclutado para trabajar para el servicio secreto británico. Su trabajo de iniciación fue convertirse en izquierdista para luego delatar a sus compañeros de universidad. Empezó su carrera como espía delegado en Alemania Occidental viviendo allí, los años más duros de la guerra fría.

En su tiempo libre se dedicaba a escribir libros, sin imaginar que al publicar su tercer libro El espía que surgió del frío, debería terminar su carrera en el servicio secreto debido a la fama obtenida por su faceta de escritor. Para ese entonces, estaba casado con su primera esposa, Ann Sharp.

La fama y la fortuna generaron serios problemas al matrimonio Cornwell, ya que Ann quería seguir viviendo el mismo tipo de vida al que estaba acostumbrada y Cornwell se encontraba cómodo en el glamour. El ambiente tenso y las constantes distancias del matrimonio propiciaron una infidelidad de John, que no solo traicionó a su esposa, sino también a su colega y buen amigo James Kennaway. Se enamoró perdidamente de la esposa de James, lo que hizo que mantuvieran una relación a escondidas, que fue descubierta por su amigo y luego el mismo David confesaría a su esposa de su existencia.

John Le Carré no se divorció de Ann para quedarse con Susan, de hecho, terminó esa relación, mantuvo su matrimonio, pero a la vez se sumergió en una serie de relaciones extramaritales en búsqueda de un amor que le llenara completamente, hasta que finalmente el matrimonio se terminó.

Le Carré se casó en segundas nupcias con Jane Eustace, ella admite que él la ha engañado algunas veces, pero ella entiende que es parte de su naturaleza, además de que la emoción del encuentro prohibido le ayuda en su proceso creativo.

En relación a su vida profesional, ha sido un escritor muy prolífico en el género del suspenso, ha ganado varios premios que no ha aceptado ya que él nunca asiste a recibir un premio.

FUENTES

https://elpais.com/cultura/2017/09/05/actualidad/1504627264_871042.html

https://www.biography.com/people/john-le-carr%C3%A9-9376419

http://www.elmundo.es/cultura/literatura/2017/08/27/59a2d220e5fdea93068b456e.html

http://www.dailymail.co.uk/news/article-3258942/Secrets-lies-le-Carr-love-stellar-spy-novel-success-drove-arms-wife-womanising-best-friend-told-time-sensational-new-biography.html